EL ÚLTIMO CUENTO (Cuento)

Todo esta tan confuso, mis recuerdos están arremolinados en mi cabeza y mi nervios aun no han recuperado su estabilidad aun. La policía continúa realizando las investigaciones de lo acontecido y a la fecha no tienen la más mínima idea de que pudo haber matado tan brutalmente a Jonathan Blake, pero es algo que yo si…pero si les tratara de explicar me creerían loca…ni siquiera puedo dar crédito que siga imaginando lo que supuestamente ocurrió en realidad en su departamento…maldito seas Jonathan Blake.

Tratare de empezar desde el principio…al menos lo que mi memoria me permita ir encajando, con la esperanza que al momento de intentar dar esta declaración yo misma pueda entender el misterio espeluznante que rodea todo este crimen.

Jonathan Blake, era un tipo tranquilo, solitario y bastante reservado en sus cosas. Frío, calculador e indiferente al mundo que le rodeaba, pero siempre se doblegaba ante el sufrimiento ajeno o del desvalido, claro, siempre y cuando lo convencieran de ello. Sí, era un gran desconfiado de todo el mundo. Sumado a ello, su fanatismo a las historias del género de terror y suspenso, que a mi parecer era lo único que le mantenía cierta alegría en su tan vacío corazón, le llevaron a investigar ciertas cosas extrañas, que quizás estuvieron relacionadas de alguna manera en su horrible muerte. Bueno, se que planteándolo de esta forma Jonathan podría parecer un monstruo, pero no era así, una vez que lo conocías al menos te esforzabas en entenderlo, demostraba ser una persona leal y comprensiva, siempre dispuesto a ayudar y proteger a los que consideraba sus amigos.

Como comentase, su pasión por el género del terror lo llevo a explorar ciertas partes de su mente que le permitieron explotar su creatividad al grado de permitirle escribir uno que otro cuento que le gustaba publicar en un portal en Internet. Si bien era un escritor aficionado, no dejaba de tener una que otra idea interesante y espeluznante que no hiciese soltar uno que otro comentario de aprobación por parte de sus generosos lectores. Si mal no recuerdo, alguna vez me comento estar buscando lograr la historia que lograse mover las fibras sensibles de los lectores y transportarlos a un mundo de oscuridad donde les hiciera sentir el significado del miedo en niveles tan sutiles hasta lograr estampárselos en el rostro en cuanto menos lo esperaran. Sin embargo, siempre consideraba que a cada cuento que escribía, el próximo lo podría hacer mejor…típico sentido de superación que no se si se aplique a esta actitud…

Su mórbido sentido de lo macabro le permitía visualizar las situaciones más inusuales o comunes, que le facilitase capturar y jugar con la psique de las personas. Hasta que llego el principio del fin.

Pasaron días, semanas, meses desde la publicación de su ultimo cuento y esto le empezaba a preocupar, podría jurar que llego a un punto de tensión tal que simplemente se perdía en sus ideas por un instante desconectándose de la realidad, como si hurgase en lo profundo de su mente tratando de recorrer los parajes desolados de su intrincada imaginación, buscando la fibra oscura que se fue desenrollando hasta quedar en nada, quedando solo una maraña de fibras que cubrían su fuente narrativa impidiéndole fluir libremente.

Recuerdo aquella vez que nos reunimos para cenar y conversamos un largo rato acerca de su situación y de lo preocupada que me tenía su comportamiento. Si bien era una persona casi impredecible, esperaba que me prestara la suficiente atención sin tener que dejarme sentada sola en el local. Afortunadamente lo tomo a bien y me contó acerca de lo que pasaba por su cabeza:

“No es que no tenga ideas, no es que mi cabeza este vacía, siempre tengo las ideas, ahí deambulando…acechantes…, solo que no se como atar cabos, reunirlas y darles forma y plasmarlas nuevamente a un “papel”, por así decirlo…y eso me tiene “complicado”, por así decirlo”

Claro, la conversación se mantuvo tranquila hasta que llego a un punto en el que si me empezó a preocupar:

“Estos últimos días he estado pasando por cosas raras, una serie de eventos que me han estado preocupando pero a la vez, han habilitado mi curiosidad por saber que sucede...tu sabes, no puedo permitirme perder una buena historia o al menos algo que me de alguna idea interesante, es por ello que me he dedicado a buscar en periódicos, revistas, televisión e Internet algo que me pueda dar la iluminación necesaria, podría jurar que he encontrado cosas que me parecen haber visto antes pero difícilmente recuerdo haberlas vivido o algo así…”

Me contó que había estado viendo cosas que no existían, voces que lo llamaban de la nada, ruidos inexplicables, personajes que lo observaban y perseguían en la oscuridad de la noche, en las calles, a los lugares donde iba, incluso hasta en su propia casa. Esto confirmó mis sospechas, realmente se estaba volviendo loco y su búsqueda por encontrar nuevamente sus ideas le estaban distorsionando su sentido de la realidad.

Durante esos meses me mantuve lo mas cerca posible a él, no era que estuviese mal de la cabeza, pero era mi amigo y necesitaba tener a alguien a su lado antes que hiciese alguna cosa descabellada, bueno, algunos les llaman excentricidades, otros simplemente se resumían a decir que estaba chiflado.

Hasta que llego esa noche en que todo terminaría tan horriblemente. Recuerdo que me llamo a mi casa y sonaba desesperado, al borde de un ataque de nervios y entre sus balbuceos me trataba de explicar acerca de las cosas que lo continuaban persiguiendo y que ya sabia que eran, jamás se hubiese imaginado que seria participe de una historia como esta…volverse el protagonista y victima de uno de sus cuentos de terror…en ese momento un crujir potente de madera se escucho al otro lado de la línea y la llamada se cortó…

Salí apresurada a su casa para ir a ver que sucedía y esperar que simplemente haya sido uno de sus momentos de desesperación o haya pretendido al menos hacerme una broma tonta de las que le gustaba hacer…que equivocada estuve.

Al momento que llegue todos mis miedos fueron superados por el terrible descubrimiento. Todas las luces del departamento estaba apagadas, salvo por la tenue iluminación que provenía de su estudio, desde un principio entendí que se trataba de la computadora donde pasaba hora tras hora escribiendo, mas aun en estos últimos meses.

La puerta estaba abierta, sin signos de haber sido forzada. Trate de encender las luces pero no respondían, así que tuve que caminar cuidadosamente hasta llegar a su estudio. Tal fue mi espanto al contemplar la escena o el terror del reflejo en la ventana o lo espeluznante de leer lo que aparecía en la computadora.

La sangre estaba esparcida por todas partes, no había lugar en el estudio que no estuviese cubierta por ella y pedazos colgando de lo que parecían ser restos de carne, vísceras o órganos…fue cuando mi atención se fijo en la ventana…un extraño reflejo de Jonathan aparecía, inmediatamente gire sobre mis talones, esperanzada de que tratase de una tonta broma, pero nada…no había nadie atrás mío…regrese la mirada y por un instante su imagen desapareció, a consecuencia de alguien que parecía estar a su lado…era completamente una locura, su departamento se encontraba en un tercer piso no podía haber alguien fuera suspendido en el aire…y antes de desaparecer parecía señalar su computadora. En ella encontré iniciado el procesador de texto y ante mis ojos apareció lo que parecía ser su ultimo escrito, pero me di cuenta que se trataba de un mensaje dirigido hacia mi tratando de explicarme lo sucedido…

“No lo pude creer cuando me di cuenta de las cosas, todo había resultado ser mi responsabilidad, todo lo que había esta aconteciendo estaban relacionado conmigo, con mis ideas, todo era parte de una historia que se había estado formando en mi inconsciente y lo que había dado cabida a una proyección maligna de mi ser…no se como explicártelo, pero todo era mi culpa…nunca perdí mis ideas…mi creatividad no se había ido…solo había decidido tomarse un descanso de mi y salir a experimentar al mundo real…y si que habían estado haciendo de las suyas. Recuerdas que te comentaba acerca de los extraños sucesos que aparecían en los periódicos o en las noticias y siempre te decía que eso me parecía familiar, pues lo era, eran ellos o eso o no lo se como o cuantos sean…pero terminaron siendo reales, todas esa muertes inexplicables. Sin embargo, no podían dejarme por más que quisieran y tenían que asegurarse que estuviera bien por la conexión que teníamos, hasta que descubrieron que tenían que volver nuevamente a mí, ya que solo tenían un tiempo de existencia en la realidad, no podían permanecer más tiempo fuera de mí. Hasta que tomaron la decisión de separarse completamente de mi y volverse independientes no se como dedujeron esto pero la única forma de hacerlo era cortando el enlace…deshaciéndose de mi para liberarse…”

Fue cuando escuche el ruido en la oscuridad de la sala, no pude evitar gritar por el espanto que tenia…fue cuando lo vi venir…de la nada apareció alguien cubierto en un gabán negro cuyas solapas con ayuda de su mano izquierda enguantada, cubrían su rostro en complicidad con un sombrero de ala ancha del mismo color, acercándose lentamente hacia mi, en su mano derecha una especie de puñal de forma que jamás antes había visto.

Se me acercaba directamente, solo logre a dar ligeramente unos cuantos pasos hacia atrás tropezándome con algo en el suelo, cayendo contra la pared y quedándome sentada el suelo cubierto de lo que era la sangre de mi amigo…

…una vez frente a mí se inclino quedando frente a frente ante la oscuridad que cubría su rostro, logrando observar sus ojos fulgurantes, que inexplicablemente cambiaban de un rojo encendido a un azul intenso…

“…nos equivocamos pequeña, pero aun tenemos otra salida…”

…y sentí el golpe en el vientre, el frió abrazo del metal atravesando mi carne y el calor infernal que inmediatamente me recorrió desde el estomago hasta la cabeza…desvaneciendo…

***

Horas más tarde, la policía llegó, dado que mis gritos alertaron a los vecinos y decidieron tomar cartas en el asunto. Estuve por varios meses internada en el hospital en cuidados intensivos, bajo vigilancia policial, como principal sospechosa de la muerte de Jonathan Blake. Sin embargo mi espanto fue mayor cuando me informaron que estaba embarazada, fue cuando entendí a que se refirió la aparición con respecto a “otra salida”…no lo permitiría, no los dejaría…

***